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viernes, 27 de enero de 2012

Old Ideas. Leonard Cohen. 2012



     El próximo 31 de enero sale a la luz el nuevo trabajo del último Premio Príncipe de Asturias de las Letras, Leonard Cohen. El gran poeta, novelista y cantante de Montreal (Canadá), vuelve a deleitar nuestros oídos con sus canciones. A sus 77 años de edad, Old Ideas (Viejas Ideas) le devuelve a la primera escena musical mundial.

     Estas son las diez canciones que componen este nuevo trabajo:

1- Amen: 7 minutos de emoción para comenzar el álbum. Por momentos, si uno cierra los ojos, parece ver y escuchar a Tom Waits. Fantástico solo de trompeta final. Los violines y los susurros de Cohen nos arrastran hasta la pregunta final del estribillo: "dime entonces lo que quieres de mí".

2- Anyhow: el segundo tema se inicia con un recitado de temática amor-desamor. Un piano fabuloso que suena a jazz lento y unos coros eróticos de acompañamiento nos llevan a afirmaciones como "tú nunca me has amado" o "ten piedad de mí, pequeña".

3- Banjo: las cuerdas del susodicho instrumento y los coros country sirven para que Cohen borde un blues muy sentido. En el fondo hay temor: la visión de "un banjo roto balanceándose sobre el mar oscuro e infectado" cuyo "deber es hacerme daño".

4- Come healing: una de las mayores joyas del disco, sin duda. Las sensuales voces gospel femeninas acompañan la cálida voz de Cohen en su búsqueda de curación de cuerpo, mente y espíritu. "Y dejad que los cielos escuchen el himno penitencial".

5- Crazy to love you: una guitarra española introduce un tema que habla de los amores insanos. Versos como "tuve que enloquecer para amarte", "tuve que convertirme en personas que odiaba", o "tuve que ser un completo don nadie" son suficientemente elocuentes.

6- Darkness: un banjo y un órgano marcan el ritmo de este gran lamento. La oscuridad se apodera de pasado, presente y futuro. "Ganarte fue fácil pero la oscuridad fue el precio". La canción habla de cómo la vida de un hombre puede irse al garete al beber de la copa de una jovencita, algo que puede provocarle enfermar de oscuridad.

7- Different Sides: el típico tema de contradicciones en el mundo de la pareja: "tú quieres cambiar la forma en que hago el amor, pero yo quiero dejarla tal cual". Es la canción con más ritmo del disco, marcado por el órgano y, de nuevo, los sugerentes coros femeninos. Un claro ejemplo de que el amor no siempre son dos personas fundidas en una sola sino dos personas distintas, cada una de un padre y de una madre.

8- Going home: Cohen recita, casi susurra, que es "un cabrón perezoso". Se flagela buscando algún tipo de redención que le permita volver a casa. El tema se convierte en "un manual para convivir con la derrota" y en "un himno de perdón".

9- Lullaby: canción de cuna de infinita ternura. De nuevo los coros femeninos acompañan a Cohen; esta vez hacia un sueño en el que ratón y gato "ahora se han enamorado y están hablando en diversas lenguas".

10- Show me the place: uno de los himnos que se convertirán en clásico con el paso del tiempo. Canción muy lenta llevada a la perfección por una gran multitud de instrumentos de viento, saxo y gaitas irlandesas. Por momentos, parece incluso un vals vienés. "Muestrame el lugar en que comenzó el sufrimiento".  


miércoles, 25 de enero de 2012

¿Por qué es necesario leer, sobre todo hoy en día?



     "La televisión ha hecho maravillas por mi cultura. En cuanto alguien enciende la televisión, voy a la biblioteca y me leo un buen libro". La frase, de Groucho Marx, resume muy bien mi forma de pensar en la actualidad. Cuando "la caja tonta" era en blanco y negro la programación de las pocas cadenas existentes todavía valía la pena. Hoy, no. En aquella época, algunos políticos lo eran por vocación, no por intereses personales y familiares. Y la mayoría de los futbolistas estudiaban una carrera porque el dinero que ganaban practicando su deporte no les daba para vivir a cuerpo de rey durante toda su vida. Ciertamente, eran otros tiempos.

     La sociedad tiende hacia la comodidad. Supongo que es eso a lo que se refieren con aquello de la "sociedad del bienestar". Del bienestar de algunos, claro. Porque el nivel de vida de los ciudadanos decrece alarmantemente gracias al aborregamiento general que conlleva la pasividad a la que nos tratan de obligar desde "arriba". Y es que George Orwell no iba desencaminado cuando escribió "1984", algo que hizo en 1949, por cierto. Sin duda, su visión sobre el "Gran Hermano"  fue todo un acierto y un adelanto de lo que estaba por llegar.

     Y es que, innegablemente, las personas somos cada vez más pasivas. Las televisiones, sean del signo que sean, potencian los aspectos más vanales de los seres humanos. Y la democracia en que vivimos esconde, en realidad, una dictadura: la de la ignorancia. Mientras la gente permanece sentada ante su aparato receptor de imágenes viendo culebrones sudamericanos e incluso españoles (sí, también los hay ya), partidos de fútbol en que unas personas cada vez más analfabetas dan patadas a un balón a razón de millones de euros que pagamos entre todos nosotros) y programas en que famosos, famosetes y aspirantes a piltrafillas cuentan sus verdades y mentiras, caminamos hacia algún lugar de donde, quizás, no logremos volver.

     Sin embargo, este artículo no es negativo, aunque lo parezca. Ni una mayoría de políticos corruptos que buscan su bien particular y no el general, ni unas cadenas televisivas que sirven a los anteriormente citados, ni Belén Esteban o Kiko Matamoros, ni Sergio Ramos o Messi, conseguirán derrotar la voluntad de las personas de mantenerse activas y controlar sus vidas. Por eso mismo es importante leer, sobre todo en la actualidad.

     Porque leer enriquece, forma, hace pensar y, como todo lo anterior, entretiene. Pero, ante todo, nos mantiene activos frente a la pasividad de ver desfilar ante nuestros ojos a políticos interesados que nos hacen creer que no se pueden ver entre sí en los debates pero que luego comen juntos en los mejores restaurantes a costa nuestra tras aprobar, también de la mano, las leyes que a ellos solo conviene; famosillos incultos que buscan su momento de gloria en esta vida, ya que es a lo único a lo que pueden aspirar estos "lumbreras"; o futbolistas que no saben ni leer ni escribir (ni falta que les hace, pues tienen a sus pies a millones de personas, pendientes de si Mourinho se rasca la oreja o la nariz, de si Guardiola hace tal o cual gesto o de si Messi o CR7, que tiene nombre de personaje de una peli de ciencia-ficción, escupen a alguna cámara porque son los que mejor le dan patadas a un balón, los más guapos y, además, no tienen abuela).

     Leer es una de las pocas cosas que nos quedan que es realmente auténtica. Y los lectores somos legión. A pesar de los pesares. Así que ¡no podrán con nosotros! Como dijo Saramago: "la botella hay que verla siempre medio llena, no medio vacía". Y Blas de Otero escribió un poema titulado "Me queda la palabra" que decía así:

Si he perdido la vida, el tiempo, todo
lo que tiré, como un anillo, al agua,
si he perdido la voz en la maleza,
me queda la palabra.

... Si he sufrido la sed, el hambre, todo
lo que era mío y resultó ser nada,
si he segado las sombras en silencio,
me queda la palabra.

Si abrí los labios para ver el rostro
puro y terrible de mi patria,
si abrí los labios hasta desgarrármelos,
me queda la
 palabra.
 
     Pues eso: nos queda la palabra. Y la mejor manera de acceder a ella es a través de la lectura, a través de una actividad que nos active y no nos haga pasivos, a través de una ocupación que nos mantenga, en una palabra, vivos. Así que: leed, sobre todo tal y como están las cosas hoy en día...
 

viernes, 20 de enero de 2012

Las horas previas a una primera presentación


     No he podido evitar tomarme la licencia de escribir en mi blog sobre las horas previas a la primera presentación de mi primera novela. Esta noche he pensado mucho y, aunque estoy tranquilo, la excitación me ha mantenido en vigilia durante buena parte de la noche. Es un período que incita a reflexionar. Todos lo sabemos. Aquí pretendo explicar cómo vive un escritor novel esos momentos nunca antes vividos.

     Ayer por la tarde las dos televisiones locales gandienses emitieron sendas entrevistas acerca de la novela y la presentación de la misma. Uno, que no está acostumbrado a verse en éstas, disfruta al máximo del momento. Pese a la timidez, está bien eso de sentirse importante por un día. Sin embargo, la tensión cansa. Y mucho. Estos últimos días cuesta conciliar el sueño, especialmente la noche anterior al día H.

     Ahora recuerdo aquel e-mail que me decidió a ponerme manos a la obra. Hace de ello dos años y un mes. Decidí escribir sobre las hazañas de Irena Sendler con una doble motivación: mantener ocupado mi cerebro para tratar de alejar de él los fantasmas del pasado y rendir un humilde y sentido homenaje a una persona maravillosa que no dudó en poner en grave riesgo su vida (y la de sus compañeros y colaboradores) para ayudar a una comunidad judía condenada a muerte por la barbarie nazi.

     Escribirla me ha llevado un año y medio. Y buscar editorial, realizar un par de correcciones de mejora y preparar su salida, medio año más. Poco a poco pasé de escribir para mí mismo, sin pretensiones editoriales, a ilusionarme con su posible publicación. Y eso supone un incremento del sentido de responsabilidad. Ahora, veo que algunas personas ¡van a leer mi novela! Y eso supera, con mucho, mis pretensiones iniciales.

     Por ello, esta noche he repasado mentalmente el guión de la presentación. Quiero que sea lo mejor posible. Quienes vengan merecen lo mejor de mí, lo que añade todavía mayor responsabilidad. Por supuesto, pienso disfrutar de cada minuto. Espero escribir más novelas a lo largo de mi vida, pero ¡quien sabe si ésta será la primera y la última! 

     Debo agradecer públicamente a muchas personas el apoyo recibido durante todo este tiempo. En primer lugar, a toda mi familia, en especial a mi hermana Rosa, quien leyó a mi lado los tres primeros capítulos de la novela y me aconsejó sobre diversos aspectos, y a mi madre, la primera en leer el manuscrito ya finalizado. Por supuesto, a mi pareja, C.R.M. (así es como prefiere que me refiera a ella en público y yo debo respetar siempre sus deseos), quien fue la primera en saber mi decisión de escribirla y me ha animado en los peores trances (en un momento llegué a estar tres meses sin escribir ni una sola palabra, envuelto en un mar de dudas).

     Escribir esta novela me ha enseñado, además, el valor de la amistad. No sería digno de llamarme amigo si no mencionara a AMIGOS / AS como David Prieto, Francisco Moncho, Antonio Molina, José ("el degollao", dicho esto con todo el afecto del mundo), Pilar Alejandre, Susa Calafat, Queles Martínez (¡a la cual ni siquiera tengo el gusto de conocer todavía en persona!), Josete Sendra, Patricia Martí, Joan Fuster, Joana Moncadas, Rafa Gregori, Ángel Atienza, Ximo Seguí, Paco Berzosa, Celia Merí, Jesús Blas Juan, etc (por favor, que nadie se sienta ofendido por la no-mención pues es difícil acordarse de todos en estos momentos). A todos / as ellos / as les he dado "el coñazo" durante mucho tiempo con "El círculo de las bondades", incluso cuando todavía no tenía ni título.

     Mención aparte merecen también personas como la copa de un pino como Agustina Pérez (mi profesora de Lengua en el instituto) y Víctor Rubio y Guillermo Puchol (técnicos del Gandia Bàsquet), quienes van a realizar auténticos esfuerzos por tratar de acompañarme esta tarde en la presentación pese a sus respectivos y casi-ineludibles compromisos. ¡Vuestra sola intención ya os hace grandes y me llena de orgullo!   

     Como podéis leer, mis horas previas son de agradecimiento y de pretensión de que vuestro esfuerzo sea humilde y mínimamente recompensado. Y, ante todo, mi pensamiento está hoy con mi hijo Tiago. Como tiene tres años y medio no lo voy a llevar al acto por razones obvias. No obstante, esta novela es para él. Guardaré y haré guardar como "oro en paño" un ejemplar de la primera edición de la primera novela que en 2012 presentó su papá. Sé que, si Dios quiere, algún día la sabrá apreciar.

     Os veo esta tarde. Buenos días, muchísimas gracias ,y buena suerte!


miércoles, 11 de enero de 2012

Human Touch / Lucky Town. Bruce Springsteen. 1992


     Lanzados juntos, pero no revueltos, el 31 de marzo, ambos discos se grabaron de forma conjunta, dándose por finalizados en enero de 1992, hace justo 20 años. Tras cinco años de silencio musical, sin la E Street Band (a excepción de Roy Bittan y Patti Scialfa), divorciado de su primera mujer y emparejado con Patti Scialfa, la ex-novia de su compañero Nils Lofgren, el Boss se lanzó a la aventura de llevar a la vez dos discos que poco tenían que ver el uno con el otro. Por eso no se editaron como un disco doble sino como dos independientes.

     Human Touch (septiembre de 1989-enero de 1992) es un disco más oscuro, con menor frescura que Lucky Town. El tema que le da título fue el single de presentación de ambos discos. En total, 14 canciones entre las que destacan la homónima referida (Human Touch), una agria crítica televisiva (57 Channels (And Nothin´On)), la mayor y mejor pieza de rock and roll de ambos discos y, dicho sea de paso, poco o nada explotada en los años y giras siguientes (Roll Of The Dice), una canción de amor-desamor de gran valor (I Wish I Were Blind) y una nana tradicional arreglada por Bruce para la ocasión (Pony Boy), muy criticada por la mayoría de sus fans desde el primer momento pero que a mí me gusta e incluso le canto a mi hijo alguna que otra noche antes de dormir.

     La verdad es que el resto de los temas de este disco están muy lejos de ser las mejores canciones de Bruce en toda su carrera musical. Quizás habría sido un disco mejor, más digerible y comercial con solamente 10 temas. Ciertamente, se puede llegar a hacer un poco largo ya que algunas de las canciones no llegan a transmitir prácticamente nada.

     Lucky Town (septiembre de 1991-enero de 1992), en cambio, es un disco lleno de frescura, alegría, luz. Ninguna de sus 10 canciones tiene desperdicio. Y el inicio, con "Better Days", "Lucky Town" y "Local Hero" es de antología. Estos tres temas te dejan sin aliento y con ganas de seguir escuchando el resto del disco. La balada "If I Should Fall Behind" rebaja la tensión rockera pero no las sensaciones que transmite el disco. Es una canción utilizada por Bruce en los años sucesivos para momentos de gran emoción en sus conciertos, incluso con la E Street Band. "Leap Of Faith" concluye la cara A del vinilo, devolviéndonos a la fuerza del demoledor inicio.

     La cara B se inicia con "The Big Muddy", un tema de relax entre la anterior y "Living Proof", otro tema en el que la batería y las guitarras nos transportan a un lugar diferente antes de volver a traernos a la serenidad con "Book Of Dreams", que nos prepara para vibrar de nuevo con "Souls Of The Departed", donde Bruce nos deleita con su harmónica en la parte central-final. El último tema del disco, "My Beautiful Reward", nos deja con un sabor de boca inmejorable, con guitarra acústica y órgano sonando de manera fantástica. Sin duda, una bonita forma de terminar un disco de gran colorido.


     En definitiva, dos discos diferentes grabados con músicos diferentes. De hecho, solamente el propio Bruce, Roy Bittan y Patti Scialfa repiten en ambos. Los deseos del Boss de trabajar con músicos diferentes le llevaron a rizar el rizo en el tour con el que recorrió medio mundo tras la publicación de los dos discos referidos. De esta manera, nuevamente, se producen cambios en la formación de la banda de acompañamiento, repitiendo también Bittan y Scialfa. Dicha gira dio como resultado el disco en vivo "Plugged", editado ya en abril de 1993, trece meses después de "Human Touch" y "Lucky Town".

Músicos que acompañaron al Boss en los discos y en la inmediata gira:

- Teclados: Roy Bittan.

- Guitarra y coros: Patti Scialfa.

- Batería: Jeff Porcaro (Human Touch), Gary Mallaber (Lucky Town) y Zachary Alford (gira y Plugged).

- Bajo: Randy Jackson (Human Touch), el propio Bruce (Lucky Town) y Tommy Sims (gira y Plugged).

- Percusión: Jeff Porcaro (Human Touch), el propio Bruce (Lucky Town) y Crystal Taliefero (gira y Plugged).

- Coros: Sam Moore, Bobby King y Bobby Hatfield (Human Touch), Soozie Tyrell y Lisa Lowell (Lucky Town) y Gia Ciambotti, Carol Dennis, Cleopatra Kennedy, Angel Rogers y Bobby King (gira y Plugged).

Ambos discos fueron producidos por el propio Bruce Springsteen, Jon Landau, Chuck Plotkin y Roy Bittan (Human Touch).

Arnaldo Otegi y el Premio Nobel de la Paz


     La noticia saltó a todos los medios digitales ayer por la mañana. Evidentemente, no estamos ante una inocentada, pues ayer era 10 de enero, sino ante algo muy grave y, sobre todo, muy serio. Una supuesta campaña de la izquierda abertzale busca la proposición de Arnaldo Otegi como candidato al próximo Premio Nobel de la Paz por su contribución al proceso de paz en el País Vasco. Como era de suponer, la polémica se ha expandido como la pólvora por doquier. Sobre todo en las redes sociales de moda.

     Otegi, de 53 años de edad, cumple actualmente diez años de condena por pertenencia a banda armada en calidad de dirigente. Militante activo, durante años, de ETA político-militar, también perteneció a las formaciones políticas Batasuna, Herri Batasuna y Euskal Herritarrok, ilegalizadas en 2002 por considerar que estaban bajo la tutela de la banda armada. Licenciado en Filosofía y Letras, casado y con dos hijos, niega su nacionalidad española y se considera vasco. Fue parlamentario por HB y EH.

     Nomenclaturas aparte, Otegi es un terrorista, un asesino, un criminal. Directa o indirectamente, es responsable, ejecutor y/o incitador, de la pérdida de numerosas vidas humanas. Y está en la cárcel por méritos propios. Además, ha hecho explotar gasolineras, ha robado coches a mano armada (usados luego para matar, secuestrar o extorsionar a seres humanos), ha asaltado el gobierno militar de San Sebastián, ha liberado a presos de hospitales, ha participado en varios secuestros (como los de Francoise Marhuenda, Javier Rupérez o Luis Abaitua) y ha tomado parte en numerosos actos en favor de compañeros etarras (siendo condenado por enaltecimiento del terrorismo por varias causas, como la de 2005, cuando participó en un acto homenaje a José María Sagardui (Gatza), el preso de ETA que más tiempo llevaba encarcelado).

     Ciertamente, no estamos ante un hombre que haya hecho méritos para recibir un Premio así. No obstante, es innegable que dicho galardón se ha devaluado sobremanera en los últimos años. Que personajes como Mahatma Gandhi (nominado hasta en cinco ocasiones) o Irena Sendler (nominada en 2007) no lo hayan recibido y sí Henry Kissinger, Al Gore o el propio Barack Obama (que incumple sus promesas electorales sobre el cierre de Guantánamo, que estos días cumple diez años, y ordenó y preparó, en 2011, los asesinatos de Bin Laden y Gadafi) dicen muy poco en favor de una institución que en otros tiempos no se preocupaba de intereses más o menos oscuros sino de valores humanos, premiando a la Madre Teresa de Calcuta, Martin Luther King, Andrei Sakharov, Lech Walesa o Nelson Mandela. 

     Por eso, entre las reacciones a la propuesta de Otegi se han levantado voces que, sin defenderla, critican a la institución noruega. Así, Fernando Savater, ha afirmado que "ha habido algunos Premios Nobel de la Paz que han sido casi tan malos como Otegi". Otros han comentado que "dar el Nobel a Otegi es como dárselo a Obama o a Kissinger". El debate está en la calle y en las redes sociales. Sin duda, el solo hecho de aceptar su pre-candidatura significaría el fin del poco crédito que todavía le queda al Comité Nobel Noruego. Antes que eso, convendría dejar desierto el galardón de este año, algo que ya ha ocurrido en diecinueve ocasiones a lo largo de sus más de ciento diez años de historia. 

     Otras reacciones a la noticia son las siguientes: Patxi López, lehendakari vasco, la califica de "sarcasmo"; la eurodiputada Teresa Jiménez Becerril, hermana del dirigente del PP andaluz, Alberto Jiménez Becerril, asesinado por ETA en 1998, ha afirmado que "por encima de mi cadáver. Moveré cielo y tierra en las instituciones europeas para que la Academia no premie al ex-portavoz de Batasuna"; Ángeles Pedraza, presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorimo (AVT), la tilda de "una inocentada de muy mal gusto" al tiempo que culpa de esta situación a las últimas acciones del gobierno español saliente; y Teo Uriarte, ex-miembro de ETA juzgado en el histórico proceso de Burgos, ha pedido que no se tome como una broma la candidatura puesto que "parece seguir el esquema de lo que sucedió en los procesos de paz de Sudáfrica e Irlanda del Norte". Según él, las negociaciones de ETA con José Luis Rodríguez Zapatero han propiciado que el entorno de Batasuna haya logrado "un prestigio evidente en los sectores alternativos de las Naciones Unidas y en otros círculos de decisión y poder".

     ¿Será este tema un legado más de las malas gestiones realizadas por ZP, Rubalcaba y sus compañeros? Esperemos que sí, aunque nunca se sabe. Lo que está claro es que, si le da el Nobel de la Paz a un terrorista, la Academia estará acabada. A lo mejor, por esas nos salvamos...