LIBROS

LIBROS

domingo, 5 de junio de 2011

Me pone el morado. Me pone el Gandía Basket


     Ante todo quiero pedir perdón de antemano si escribo alguna incoherencia. Llevo despierto ya más de 24 horas, de las cuales me he pasado 12 en un autobus matapersonas a más no poder, en el que he recorrido más de 900 kilómetros. Me he mojado y estoy tremendamente cansado y con amargos dolores de espalda, piernas, culo y cervicales. Resumiendo, estoy muy jodido ¡pero muy contento! Y en estos casos lo segundo hace que uno se crezca.

     Como el Gandía Basket, que hoy (o ayer, porque ya no sé si es sábado o domingo), consiguió el ascenso a la LEB Plata de una manera épica, sufrida y agónica. Si algo caracteriza en los últimos años a este club, que es una pequeña gran familia humilde y coraginosa, es el carácter y la dureza mental en situaciones críticas. Como la vivida hace unas horas en Vic. Con 16 puntos de desventaja mediado el tercer cuarto, las cosas se ponían muy difíciles. Bloqueados en ataque, solo había una salida para meterse de nuevo en el partido: defender a muerte.

     Y eso es exactamente lo que hicieron los espartanos jugadores del Gandía Basket, ejercer de auténticos Buzz Lightyear y luchar "hasta el infinito y más allá" persiguiendo un sueño utópico finalmente hecho realidad gracias a un parcial de 19-32 en el último cuarto y medio de partido, eliminatoria y temporada.

     La comunión equipo-aficionados, la gran clave que convierte a este club en temible para cualquier rival (nos estamos ganando la fama "por cojones"), funcionó a las mil maravillas una vez más, haciendo posible lo que parecía casi un milagro a falta de 15 minutos para acabar el partido. La última canasta de Javi Rodríguez, el capi, marcaba sentencia a escasos segundos del bocinazo.

     Este equipo, con un cuerpo técnico de LEB Oro (y no me dejo cegar por la euforia del momento), ha conseguido que los 80 aficionados gandienses hiciéramos callar a los casi 800 vicenses o vigatanos (¡gracias Google!). Así es el conjunto morado de estos últimos años, como quedó demostrado en Tarragona (donde ellos ganaron pero nosotros lo celebramos y disfrutamos) o Cornellà (donde se consiguió el, hasta ayer, último ascenso). Aquellos dos días no los olvidaremos mientras vivamos. El de hoy ni cuando muramos...

     Deportivamente el equipo ha vuelto a demostrar, una vez más, que su sitio está en la LEB. Ahora es turno de APLEG y los políticos. De una vez, éstos deberán demostrar si quieren basket de calidad en nuestra ciudad. Si por mi fuera, este equipo subiría de categoría haciendo muy pocos retoques. La base de ocho jugadores la mantendría, pues se han ganado a pulso jugar en LEB Plata. Lamentablemente, estamos de nuevo en manos poco recomendables. Eso sí, estoy seguro de que esta noche serán más de cuatro los políticos que no pegarán ojo...

     En fin, que no veo las teclas y me voy a la cama ya. Mañana será otro día. Y despertaré "de plata". Jodido pero contento. Porque me pone el morado. Me pone el Gandía Basket...
Victor Rubio
Guillermo Puchol
Fran Baquer
Xavi Guía
Antonio Segovia
Fabio García
Piti Catalá
Javi Rodríguez
Iván Zhauniarovich
Shalawn Miller